miércoles, 31 de octubre de 2012

Cambios de uso de suelo acaban mil 700 parcelas fertiles


Oscar de la Rosa, Zamora

“Ya no hay parcelas agrícolas, ni en renta ni en venta, sino es a precio de terreno urbano; es triste ver como la tierra dedicada al cultivo escasea y ya no es el mismo panorama de hace 30 años en donde abundaban las cosechas y éramos más autosuficientes”, señaló Luís Hernández Barrera, productor agrícola, en reunión entre agricultores para firmar un acuerdo que presentaran a las autoridades municipales e integrantes del Congreso del Estado con motivo del incremento en el cambio de uso de suelo de tierras fértiles de esta región de Michoacán.

Enfatizó que incluso la agroindustria hoy se ve amenazada porque no hay los suficientes insumos básicos para que realicen el procesamiento de frutas o legumbres y por consecuencia tienen como alternativas el trasladarse a otros puntos de la república a trabajar o a cerrarles de manera definitiva, sin importar el recorte de fuentes de empleo y que esta región se queda sin la percepción de ingresos.

“Un crecimiento desordenado, estrangula y obstaculiza aún más el tránsito de vehículos, personas, insumos y maquinaria; en las tierras agrícolas nos genera contaminación y mayor inversión para tener verdadera eficiencia y productividad en cada uno de los trabajos que hacemos porque recordemos que hoy en día destinamos hasta 250 mil pesos para mantener una hectárea de cultivo de fresa, hortalizas y berries, que son las de mayor producción en el valle”, indicó.

En reunión sostenida por agricultores, representantes de colegios e instituciones ambientales, Genaro Morales, agricultor de Chaparaco, hizo un llamado a las autoridades municipales, para que tomen en cuenta la situación que ocurre con relación a la agricultura porque de lo contrario serán los principales responsables de no cuidar los intereses de los campesinos por anteponer aspectos como la especulación, corrupción, codicia e irresponsabilidad.

“Es lamentable lo que a últimas fechas ha sucedido en relación a las licencias de uso de suelo en administraciones anteriores porque en ningún momento se tomó en cuenta una opinión colegiada de nosotros para acabar con tierras de cultivo que para nosotros son importantes; si no frenamos la situación, prácticamente vamos a acabar con la riqueza que tiene el valle de Zamora en relación a la agricultura”, concluyó Jorge Hernández Álvarez, coordinador de propietarios ejidales en la región.

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